por Eliseo Sequeira, desde Montevideo

Abrió la reunión el Presidente de AHRU, Asociación de Hoteles y Restaurantes del Uruguay, Cr Juan Martinez, historiando cómo se llega hasta esta instancia. Remarcó que la hotelería es el sector que más vende con tarjetas de crédito, especialmente a influjo del turismo. Señaló el efecto distorsivo que tiene diferencias de hasta 8% en los aranceles, frente a una incidencia del impuesto a la renta del 3-4% sobre las ventas. Si a ello se le agrega que los pagos se reciben como mínimo a los 21 días y muy frecuentemente a más de 30 días, frente a la obligación de hacer frente al contado los insumos de los establecimientos, lo cual redunda en los costos y la competitividad.

El Doctor Julio Facal ( CAMTUR, CHRPE), señaló que el tema es común a todos los sectores de la actividad económica. Historió el nacimiento (a inicio del siglo XX en EEUU) y desarrollo de las tarjetas de crédito, y cómo los bancos entraron en el negocio.  Conceptualmente se basa en un ahorro público que genera una colaboración empresarial y sustituye a la moneda y al crédito.

Hay una triple relación jurídica, que clásicamente incluía al emisor (sello+banco), al comercio y al usuario, pero que se ha ido ampliando y tornándose más complejo y global.  Uno de tanto detonantes, ha sido que al estar involucrado el sistema financiero, las denuncias efectuadas en el marco de las Leyes de defensa del consumidor (17.250) y de la competencia (18.159) fueron tomadas por el BCU (Banco Central del Uruguay), quien archivó las mismas sin resolución fundada.
El Doctor Javier Gomensoro ( Comisión de Defensa de la Competencia,  MEF) resaltó que esta ley viene a actuar sobre un mercado que demostró precisa de regulación, pues no se cumplieron con las normas de un libre mercado sino que se actuó corporativamente. Va a alterar significativamente el sistema para bien del usuario, eliminando prácticas oligopólicas.

la Doctora Dora Szafir (Universidad de la República) señaló cómo la Ley de regulación del consumo busca eliminar las prácticas y cláusulas abusivas. Siempre que haya sujetos que impongan unilateralmente sus condiciones generando desigualdad en el ejercicio de los derechos, el Estado no puede ser prescindente y debe regular.

El Proyecto con media sanción regula minuciosamente la información del sistema, la cual debe ser clara, veraz, suficiente y legible. Dio abundantes detalles de cambios y mejoras en el sistema. Al mencionar que se derogan específicamente regulaciones del BCU que se oponen a las Leyes 17.250 y 18.212 (Ley de usura), comentó que no se comprende cómo con una norma administrativa se contradecía una Ley, que es jurídicamente de superior jerarquía, acotando una máxima de Leonardo Da Vinci "quien no castiga el mal, manda que se haga".

El Diputado Daniel Peña (PN) resaltó que es el proyecto más removedor del sistema financiero de los últimos tiempos. El Uruguay se encamina a una bancarización obligatoria. En setiembre comienzan a regir descuentos del IVA sólo con tarjetas de crédito y débito, por lo que se estima que el pasaje de dinero por el sistema de tarjetas pasará de U$S 4.000 millones al año a más de U$S 30.000 millones. Por ello esta regulación es imperioso se complete antes de fin de año.

Denunció que los bancos han contratado dos prestigiosos estudios que están haciendo lobby senador por senador, por lo que resaltó que este proyesto es de todos, y entre todos lo debemos defender.

El Diputado Gonzalo Mujica (FA) enfatizó que si no hubiese existido crisis financiera en EEUU, este proyecto no existiría. Ello se debe a que los técnicos, independientemente de su filiación política, creían que este mercado debía resolverse entre particulares. Este paradigma fue destruído por dicha crisis, en la que EEUU salió al rescate de los bancos por razones políticas, pues técnicamente habría que haberlos dejado entrar en bancarrota.

Resaltó que las sucesivas crisis han mostrtado que los mercados dejados librados a sus propias leyes llevan a la concentración de la oferta y exclusión de la demanda. Resaltó como un punto fuerte de este proyecto de Ley, que la pelea por su arancel de los más fuertes de cada sector, automáticamente baja el techo que deberán pagar los más débiles, pues fija un margen máximo de variación entre extremos del 2%. Otro elemento que incluye para evitar prácticas abusivas, es que las promociones que se realicen a través de las tarjetas deben ser por rubros, y no por comercios.
Finalmente, el Señor Herminio Castro (Cámara de Importadores de Calzado y COMEPA) resaltó que desde aquel célebre no a las tarjetas que surgió hace dos años de las gremiales de hoteles del departamento de Maldonado, es que se fue forjando este movimiento, que hoy nuclea a más de 30 cámaras empresariales y numerosos centros comerciales de todo el país.

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