por Sergio Antonio Herrera, desde Salinas, Uruguay - @DelPDA

Lo pasado
Con la "renuncia" del ministro, como lo informamos el 29 de mayo de 2012 en El Doctor Héctor Lescano deja el Ministerio de Turismo y Deporte expresamos claramente -cuando aún no se sabía quien lo subrogaría-: "Al ser el Ministro únicamente el que sale de la conducción de turismo y deporte y permanece el resto del equipo, claramente quedan dos posibilidades: o bien asume el cargo un subrogante directo nuevo, o bien se puede dar otra situación que es por la que de ser necesario, nos definimos: que haya un ascenso escalonado en los cuadros jerárquicos, pasando al cargo de Ministro, la actual Subsecretaria Liliam Kechichian". Léase con atención nuestra sugerencia.

Durante ese período, condujimos en AM 810 El Espectador, el programa Portal de América Radio y a causa de que luego de una licencia reglamentaria, la ministra Kerchichian no se reintegró sino hasta algún día después de lo reglamentario (al menos fue lo que nos informaron) corrió la versión de un eventual altercado con el por entonces Director Nacional de la cartera, Benjamín Liberoff, y que era esa la causa de su demora en reintegrarse. Dijimos al aire casi textualmente: "Está demorando en volver a su función la ministra Kechichian, pero es entendible, trabaja mucho y merece descansar". A las pocas horas, al final de una reunión abierta de la Cámara de Turismo en la ciudad de San Carlos, de muy mala manera, en tono alto y ante la presencia de diferentes actores del sector, se dio un diálogo que reflejamos el 7 de abril de 2013 bajo el título: Ministra Kechichian: "lo que dijiste es una hijaputez" ¿Me estás diciendo que soy un hijo de puta? le preguntamos. "No -empezó a responder-, lo que digo es que el que te dijo eso es un hijo de puta", nos dijo la Ministra de Turismo y Deporte de Uruguay, Liliam Kechichian la noche del sábado, en medio de un coctel ofrecido por el Municipio de San Carlos al finalizar la Segunda Reunión Abierta de la Cámara Uruguaya de Turismo, interceptándonos, sin saludo previo, como quien ostenta poder, pretendiendo rezongarnos como si fuésemos subordinados suyos a la vista de todos los presentes". Luego de ese lamentable episodio, el diálogo se truncó y durante la gestión, el equipo comenzó a mostrar características muy diferentes y se hicieron reiteradas las declaraciones públicas de su administración, multiplicando como por arte de magia los datos estadísticos, hasta el punto de decir que Uruguay tuvo en algunos momentos más de 4 millones de turistas ingresados y falseando la cantidad de empleos directos que genera el turismo, diciendo que eran más de 110 mil, cuando son bastante menos de la mitad. Si bien el lapso de tiempo que fue desde aquel mes de mayo de 2012 al final de ese período, la gestión del Mintur fue bastante desprolija, este últimos período que finaliza en pocos días (2015-2020), fue -a nuestro criterio-, aún peor, dejando al empresariado del sector en una situación bastante comprometida. La gestión a cargo de Kechichian, con Benjamín LIberoff como la materia gris del equipo jerárquico, fue a nuestro entender, la peor administración del turismo de la historia. El tiempo será nuestro aliado, sólo habrá que dejarlo transcurrir. Vale dejar constancia que no hablamos en absoluto de deshonestidad en la función ni de falta de dedicación, lo que decimos simplemente es que fue una muy mala gestión, errática, con objetivos equivocados, con un enfoque distante de lo que debe ser la conducción de un organismo de esta actividad, confundiendo funciones con las de otras secretarías, especialmente con las del Ministerio de Desarrollo Social, con fines evidentemente propagandísticos.

Lo que viene
El cambio -a nuestro leal saber y entender-, a todas luces será radical.
Al designado ministro no lo conocíamos personalmente y cuando sonó su nombre por primera vez, expresamos nuestra disconformidad en este mismo sitio ya que queríamso un técnico para el cargo y no un político. Una vez que fue designado, también en este espacio dijimos que le deseábamos el mayor éxito; que estábamos dispuestos a -de ser requerido-, brindar nuestro aporte empírico. Con Remo Monzeglio, tenemos una amistad de más de 30 años y lo que es más importante: coincidencia en la mayoría de lo temas inherentes a la actividad. Luego de su designación tuvimos un par de encuentros con Germán Cardoso y sobremanera en el segundo de ellos -en Madrid, durante FITUR- una charla muy profunda en la que quedó muy claro de su parte, un gran sentido de ubicación de cara a lo que vendrá; su disposición a tener "orejas grandes y boca chica" y a expresar con mucha humildad que no le temblará el pulso cuando tenga que consultar algo. Anteriormente, también aquí dijimos que -hasta poder evaluar a la nueva administración, observaríamos un respetuoso silencio editorial.
Queremos con este artículo -una vez más y como es habitual en nosotros-, fijar posición, no hacernos los distraídos. En ese marco decimos que comienza una nueva etapa, que depositiamos como corresponde nuestra confianza y nuestra esperanza en la nueva conducción y que ratificamos nuestra disposición a aportar lo que sea requewrido en aras del bien común, como buenos uruguayos que nos sentimos y somos.
Quienes nos conocen, luego de 55 años en el turismo y de más de 34 en el periodismo especializado, saben sobradamente que no estamos firmando ningún acuerdo de vale todo y mucho menos, de obsecuencia. Elogiaremos lo elogiable y estaremos atentos al análisis de la gestión. Pero vale expresar que hay muchas coincidencias con los nuevos conductores y por lo tanto, la suerte de ellos, será la nuestra, por lo que si nos toca ejercer la crítica, a la vez que al equipo jerárquico, estaremos haciendo de alguna manera, también autocrítica.
Dicho lo anterior, invitamos a todos a sumar en esta nueva etapa, Los palos en la rueda ya los ha puesto el cambio climático, la macroeconomía y la propia realidad que es la única verdad, por tanto, no agreguemos otros.

Portal de América