por Sergio Antonio Herrera, desde Jujuy, Argentina - @DelPDA
A pesar de la distancia con nuestro lugar de trabajo, tratamos de "meternos" en el tema y en primera instancia encontramos el artículo de los colegas de Aviación al día: Dos aviones estuvieron a punto de colisionar en el aire el cual es muy esclarecedor y también nos enteramos que en la comunidad hubo mucho movimiento e intercambio y también el pronunciamiento de ATEPSA, el cual compartimos a continuación:
Elegimos para titular este artículo, como queda a la vista, la terminología usada por los técnicos y no por mera comodidad, sino porque coincidimos en la apreciación.
Si bien esta historia transcurre en la Argentina, pudimos saber que la gente de ACTAU, los controladores de tránsito aéreo uruguayos, estuvieron en contacto con sus pares del vecino país y como ya lo hemos hablado con ellos muchas veces, las condiciones macro en que se está operando la aviación civil en la región deja mucho que desear.
Es verdad que los gobiernos se preocupan más por su imagen pública inmediata y por la propaganda que se pueda hacer a partir de determinados emprendimientos como por ejemplo, "la revolución de los aviones" que desarrolla Argentina, la cual en un principio nos entusiasmó y alabamos y con el tiempo (y fundamentalmente con el revés de la estrategia económica del gobierno de Macri)nos fuimos dando cuenta que se iba deteriorando.
Con la seguridad del transporte aéreo no se puede improvisar, no se puede jugar.
No pueden colapsar destinos como Aeroparque o Ezeiza.
No pueden trabajar los técnicos en condiciones laborales en algunos casos deplorables.
Porque es verdad que "pueden haber consecuencias" y si las hay, "habrá responsables" y seguramente no serán ni pilotos ni controladores.
Y fundamentalmente, no deberían darse nunca más situaciones como la de "inútiles" e "idiota".
Pilotos y controladores son protagonistas demasiado valiosos de la aviación civil como para tener que atrincherarse corporativamente para defender su accionar.
Dios no quiso que los aviones de Austral y Avianca se estrellaran.
Sería de esperar que no vuelva a darse un error de apreciación tan grave de ningún controlador, que ponga en riesgo la vida de tanta gente y para que ello ocurra, a quienes le corresponde, o sea, a las autoridades aeronáuticas, deberán hacer la revolución interna, la que hace falta, la que no se ve, la que no da rédito político pero asegura indemnidad moral y penal, lo cual no es menor.
Si el sistema funcionase como es debido, no habría habido "inútiles" ni "idiota", por la sencilla razón que tanto los pilotos como los controladores saben muy bien lo que hacen, a tal punto lo saben que en muchas oportunidades, en las que han tenido diferencias, también tuvieron la grandeza de juntarse a hablar de ello.
Ningún piloto quiere estrellarse, ningún controlador quiere hacerlo estrellar, pero, por las equivocadas presunciones de defensa del corporativismo, no se puede caer en la irresponsabilidad de filtrar un audio como el que se viralizó.
La seguridad del transporte aéreo es vital para resguardar las vidas humanas y si vamos a lo práctico o frívolo, es imprescindible para seguir teniendo esos empleos tan prestigiosos y pretendidos.
Tan importante como pilotear o controlar es el sentido de confidencialidad. Viralizar un audio como el que nos ocupa, más allá de señalar la falla de una persona o de una función, daña al sistema todo.
Portal de América