por Ramón de Isequilla, desde Madrid

En este complejo sistema de elección, al momento sabemos que hay cuatro candidaturas firmes, estando algunas otras sobrevolando y también un tapado de la India, no sabiendo aún si son candidaturas reales o instrumentales para la dispersión del voto, FITUR nos mostrará alguna patita.  

Las candidaturas firmes son, la del actual secretario general Zurab Pololikashvili, ante la cual opinamos en su momento, que no era del todo conveniente volver a presentarse, pues el mismo se encuentra afectado en forma indirecta por el escándalo de corrupción de la familia del presidente del gobierno de España Pedro Sánchez, y el desprestigio sobre el gobierno socialista que está surgiendo de las investigaciones, pudiendo el avance de las investigaciones judiciales  afectar seriamente la imagen del turismo, por ello entendemos, o que debe aclarar plenamente sobre su total desvinculación con la trama de corrupción, o dar un paso al costado.

La segunda candidatura es la del griego Harry Theoharis, un europeísta convencido con vasta experiencia legislativa y en gestión de gobierno y si sumamos a esto, el hecho que Apostolos Tzitzikostas, es el nuevo comisario de Transporte y Turismo de la Comisión Europea, podemos pensar que Harry Theoharis es el “candidato de la Unión Europea”, con estrechos vínculos con Arabia Saudita.

La tercera candidatura es la del senegalés Faouzou Dème. Este destacado profesional, con una trayectoria de más de 30 años en el sector turístico, tiene el apoyo de un continente muy singular y ha desempeñado un papel crucial en la promoción del turismo sostenible en África. A lo largo de su carrera, ha colaborado estrechamente con gobiernos, instituciones internacionales y empresas privadas para fomentar el desarrollo turístico como motor de crecimiento económico y cohesión cultural.

La cuarta candidatura es la de la operadora mediática Gloria Guevara que, durante su paso por la secretaría de turismo de Méjico, la presidencia de la WTTC y como asesora del ministro de turismo saudí, hizo gala de un impecable manejo de los medios de comunicación y la construcción de una imagen deslumbrante como experta al servicio del sector turístico.

Sobre esta profesional brillante sobrevuelan algunas dudas por parte de los algunos referentes del sector, empresarios y técnicos que no son portada de medios, pero cuando opinan hay que tomar nota.

Esas dudas radican en primer lugar, del apoyo (necesario estatuariamente) del actual gobierno de Méjico, sumido este en una espiral de violencia y corrupción por parte del narcotráfico caribeño, recién auto proclamado socio estratégico de la dictadura cubana y enemigo visceral de España y de todo lo que representa occidente, debiendo afrontar en los próximos meses la política exterior de Donald Trump, lo cual aumentará su inestabilidad y debilidad de origen.

La segunda duda proviene del desierto, especialmente del apoyo de Arabia Saudita, cuyo paso como asesora fue muy productivo, mejorando en parte la pésima imagen internacional respecto al respeto de los derechos humanos que tiene la monarquía saudita y asesorando en la creación de una infraestructura turística realmente sorprendente.

Pero los españoles y los europeos, no nos olvidamos que lideró el proceso de quitar a Madrid la sede de ONU Turismo para llevarla a Riad, con lo cual los cuarteles generales del mayor organismo internacional del turismo, hubieran pasado de la actual capital del líder del turismo mundial, a una ciudad en construcción en el desierto, no por un tema estrictamente turístico, sino por un juego geopolítico de poder sunita, en el escenario de su enfrentamiento con occidente y con las otras monarquías de la región.

Finalmente, la mayor preocupación que detecté en mi última ronda de consultas, radica en su supuesta dependencia del WTTC, mucho más después del entusiasmado apoyo que le brindaron a su candidatura, recordando que su paso por la presidencia del WTTC en aquellos tumultuosos años de la pandemia, no fue del todo feliz debido al papelón de haber creado los “Safe Travels” que se obtenían sin ninguna intervención de autoridades sanitarias, generando en lugar de certezas, incertidumbres sobre a quién creerle, incluso padeciendo algunas denuncias sobre los peligros sanitarios que generaría.

Las herramientas que salen de la chistera de los gurús marketineros están muy bien, son necesarias para el desarrollo de cualquier actividad, pero de ahí a ser referentes de la salud de la población, hay un paso muy grande.

Pero el tema de fondo no es ninguno de los que hemos expuesto, el tema crucial, es el futuro de “Miembros Afiliados de la Organización Mundial del Turismo”.

La anteriormente denominada OMT, hoy llamada ONU Turismo, es el único organismo de las Naciones Unidas que tiene dentro de su estructura al sector privado, formado por empresas turísticas, universidades, asociaciones profesionales, gestores de destinos, organismos público/privados del sector y ONGs, siendo uno de sus objetivos principales ser el ámbito natural de asesoramiento tanto a las autoridades nacionales, regionales e internacionales en temas en que deban tomar decisiones que afecten al turismo.

Los “Miembros Afiliados” están conducidos por un Board, (del que tuve el honor de formar parte durante tres períodos por el voto de mis pares), y pese a algunas resistencias desde las autoridades ejecutivas de la OMT, Miembros Afiliados ha cumplido con su labor, que fue sin embargo bastante criticada por personajes y periodistas que fueron desplazados en su momento de su órbita, por diversos motivos.  

¿Qué es el WTTC y como juega en este tema? El WTTC es un lobby empresarial internacional, formado por algunos de los más prestigiosos y poderosos empresarios y empresas del sector, cuyas opiniones son escuchadas y sus informes leídos con detenimiento por los distintos gobiernos del mundo, prestigio, conocimiento, solvencia y poder, podríamos decir que son los valores que más saltan a la vista, pero no nos engañemos es un “lobby empresarial” y su objetivo es defender loa legítimos e irrenunciables intereses de sus empresas, cuestión que de ninguna manera debe confundirse con la opinión y consejo neutral que puede dar el rico y variado conglomerado de “Miembros Afiliados” para el desarrollo del sector.

En la asamblea general celebrada en Madrid en 2021, se anunció que el cierre sería con la participación del sector privado, por lo cual me imaginé que la presidencia del Board de Miembros Afiliados liderara el acto, pero ante mi sorpresa y la de muchos, ese espacio fundamental en la perspectiva de la participación público privada de la OMT, fuera obsequiado al WTTC en bandeja de plata, resultando imperdonable que un organismo de Naciones Unidas, único con representación del sector privado le regale a un lobby empresarial la representación de un sector pero ellos sabrán por qué lo han hecho.

Finalizando, la información que nos llega es que Gloria Guevara de ser elegida secretario general, desactivaría a los más de 500 Miembros Afiliados, en sus roles y funciones, llevándolos a la irrelevancia total, entregando de facto la representación internacional del sector privado del turismo a un lobby empresarial.  

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