Los animales que hibernan se desperezan en sus cuevas y se preparan para regresar a la naturaleza. Una naturaleza que ve cómo comienza de nuevo su ciclo vital. Desde los albores del tiempo, el ser humano ha esperado la llegada de la primavera con ansia y auténtica veneración.
En los tiempos prehistóricos, significaba tiempo de cosechas; de volver a la caza; de dejar de pasar frío y penurias en la oscuridad. Hoy en día, también celebramos la primavera porque nos trae luz, calor, alegría y, en definitiva, un estallido de vida. La efusividad primaveral se refleja en auténticos festivales en el mundo que merecen la pena ser vividos en primera persona.
El Böögg representación del invierno en Sechseläuten
SECHSELÄUTEN, SUIZA
Esta celebración, que tiene lugar el primer lunes después de Semana Santa en Zurich, posee siglos de historia. En ella, el principal protagonista es una especie de muñeco de nieve al que llaman Böögg.
El Böögg, que representa al invierno, es paseado por las calles de Zúrich en un desfile que incluye caballos, flores y gentes vestidas con trajes tradicionales. Tanta algarabía no acaba bien para el pobre muñeco de nieve, pues al final de desfile –concretamente, cuando el reloj de Grossmünster da la 6 de la tarde– lo suben a una pira de ramas y le prenden fuego.
Para colmo, la cabeza del muñeco está repleta de petardos y la tradición reza que cuanto más rápido le explote, mejor será el verano que está por venir. Ajenos al sufrimiento del pobre Böögg, todo Zúrich se divierte con bailes, conciertos y eventos gastronómicos.
Songkran, Tailandia. Tourism Authority of Thailand, 2009.
SONGKRAN, TAILANDIA
En Tailandia los inviernos pasan algo desapercibidos, pues el calor tropical es perenne en uno de los países más turísticos de Asia. Sin embargo, una gran tradición primaveral tailandesa es la celebración de su Año Nuevo. Tiene lugar del 13 al 15 de abril, y aquí se decantan más por el agua que por el fuego suizo.
El primer día de esta festividad se llama Songkran Day, e incluye coloridos desfiles budistas por todo el país. La segunda jornada, llamada Wan Nao, es el día en el que la gente local visita sus templos y los reproduce en fantásticas figuras de arena. El día 15 se hacen ofrendas en los templos para comenzar con buen pie el nuevo año.
Durante los tres días, las batallas de agua –con cubos, pistolas de agua, globos y todo lo que podamos imaginar– toman las calles de Tailandia en una fiesta muy celebrada tanto por la gente local como por los extranjeros.
Marzanna, Polonia. Turismo de Polonia
MARZANNA, POLONIA
Marzanna es un festival de primavera que se celebra en Polonia y algunos otros países eslavos. Marca el final del invierno, tiene lugar la tarde del 21 de marzo y está protagonizada por distintas actividades tradicionales. Una de las más populares es la quema de Marzanna, la versión polaca de la diosa eslava del invierno, las plagas y la muerte.
Los supersticiosos eslavos quieren protegerse de su maldición helada, alentar la llegada oportuna de la primavera y asegurar una buena cosecha. Para ello, participan en una especie de quema de brujas a la antigua, seguida de un ahogamiento (solo por asegurarse de que Marzanna ya no levanta cabeza).
Como no todo va a ser quemar y ahogar, también se realizan bailes, conciertos y reuniones de amigos y familiares para celebrar la caída de Marzanna.
Chilam Joshi, Kalash Valley. Omer Imran / Wikimedia Commons
CHILAM JOSHI, PAKISTÁN
Una de las celebraciones de primavera más interesantes y originales del mundo es Chilam Joshi, que tiene lugar en un valle remoto del norte de Pakistán.
Chilam Joshi es la celebración anual de primavera del pueblo Kalash, una pequeña minoría que lleva una vida tranquila, y algo dura, entre las montañas del país. Aunque la gran mayoría de los paquistaníes son musulmanes, los Kalash practican su propia religión ancestral y hablan su propio idioma.
Este festival tiene lugar durante 4 días de mayo, coincidiendo con el comienzo de la temporada de cosecha tras el largo invierno. La gente local pasa esos días rezando y ofreciendo leche a sus dioses, además de bailando y bebiendo un vino caliente destilado por ellos mismos.
Cimburijada, Zenica, Bosnia. ZUMA Press, Inc. / Alamy Stock Photo
CIMBURIJADA, BOSNIA
Cimburijada es una de las celebraciones de primavera más peculiares del mundo. Tiene lugar en la ciudad de Zenica (Bosnia) el 21 de marzo, para conmemorar el inicio de la primavera.
Ese día, los lugareños se reúnen en una gran pradera, instalan grandes tiendas y disfrutan de un día de cantos, risas y juegos. Pero la actividad principal es realmente curiosa: cocinan una gran olla de huevos revueltos para todo el pueblo. Más de 1.500 huevos que servirán de desayuno para todos.
Después, mucha gente se sumerge en las frías aguas del cercano río Bosna para renovarse antes de la llegada de la nueva estación.
La historia del 'hanami' la contemplación de los cerezos en flor
HANAMI, JAPÓN
Cada primavera, personas de todo el mundo acuden a Japón para vivir sus celebraciones del Hanami. Así, la gente admira la belleza de la floración, disfruta de comidas y bebidas tradicionales, y participa en una variedad de actividades culturales.
En Japón, Hanami es una tradición centenaria que se centra en la fascinación por la floración de los cerezos. La gente suele reunirse bajo esos árboles para hacer un picnic y beber sake; y muchas ciudades organizan festivales con desfiles, música y otros entretenimientos.
Las celebraciones de Hanami también son populares en Corea del Sur y China, donde normalmente consisten en admirar el florecimiento de los ciruelos o los melocotoneros.
Durante los últimos años, los festivales de Hanami también han comenzado a surgir en otras partes del mundo, como Canadá, Estados Unidos, Australia y algunos países europeos.
Parlamento de Canadá rodeado de tulipanes rojos.Vlad Ghiea / Alamy Stock Photo
FESTIVAL DE LOS TULIPANES, CANADÁ
La primavera trae consigo varios festivales en el mundo de floración de tulipanes. Aunque esta planta es muy famosa en Países Bajos, el festival de tulipanes más grande del mundo se celebra en Canadá. Y, ¿qué relación tiene ese lejano país con los tulipanes holandeses?
Pues la tradición del festival se remonta a 1953. Ocho años antes, en 1945, los reyes de Holanda regalaron a Canadá 100.000 bulbos de tulipán, como muestra de agradecimiento por haber albergado a la princesa holandesa y sus hijas durante la Segunda Guerra Mundial. Desde entonces, los monarcas cumplieron la tradición y enviaron 20.000 bulbos de tulipán cada año.
Hoy en día, durante un festival que se extiende durante 10 días en mayo, podemos ver, en el Comissioner’s Park de Ottawa, una auténtica alfombra, de más de 1 kilómetro de longitud, de coloridos tulipanes. Además, durante esos días hay conciertos, fuegos artificiales, charlas y mucho más.
Fallas, un espectculo único.
LAS FALLAS, VALENCIA
Y, por supuesto, en España también sabemos cómo celebrar la llegada de la primavera a lo grande. En Valencia, las Fallas se han convertido en una fiesta de reconocimiento internacional.
Aunque hay gente que relaciona el origen de las Fallas con la quema de la madera sobrante, en los talleres de los carpinteros, antes del día de San José; también hay otros que afirman que tiene que ver con las hogueras con las que los paganos precristianos saludaban a la primavera.
Nos acogemos a esa segunda acepción (mucho más fascinante) para incluir a las Fallas de Valencia en esta lista. Durante nada menos que 19 días de marzo, nos esperan conciertos, desfiles, grandes paellas, mascletás, fuegos artificiales, ofrendas florales y, como colofón, la noche del 19 de marzo, la quema de los cientos de monumentos falleros que ocupan la ciudad.
Portal de América - Fuente: Condé Nast Traveler