Entre ambas terminales portuarias descendieron 261.000 turistas y tripulantes, un 17,8% menos que en la temporada anterior. De ellas, 159.285 descendieron en Montevideo y 101.419 en Punta del Este. Estos visitantes gastaron un total de U$S 9,8 millones, un 12,1% menos que la temporada anterior, según los datos recabados por I&E, aunque estiman que dicha cifra puede estar subestimada por las dificultades de recoger la información de los cruceristas que tienen excursiones precontratadas. Asimismo, en dichas cifras no están incluídos los gastos de las armadoras ni de avituallamiento de los buques.
El mayor contingente en ambos puertos fue el de los brasileños, seguidos por los argentinos y norteamericanos (estadounidenses, canadienses y mexicanos). El principal tramo etario de los visitantes fue, en ambos casos, el de 45 a 59 años; 38,1 % en Montevideo y 34,8 % en Punta del Este.
Kechichian afirmó que el equipo ministerial analiza los posibles factores que puedan explicar el descenso. "Ningún barco llega solo a Punta del Este y Montevideo. Incorporan nuestros puertos como parte de un circuito suramericano que puede incluir los chilenos Valparaíso y Viña del Mar; Santos y Río de Janeiro, en Brasil, y el puerto de Buenos Aires”. Agregó que "Las autoridades de estos países tenemos claro que debemos trabajar como región y ya lo hemos hecho en el ámbito de la principal feria del crucerismo, la Seatrade, en Miami". En la próxima temporada de cruceros 2017-2018 atracará en los puertos uruguayos un número similar de buques.
Por último, reiteró que el Poder Ejecutivo resolvió que las instalaciones de la actual sede ministerial, que pertenecen a la ANP, se destinarán a terminal de cruceros. Una vez que firme el Presidente, el Mintur pasaría a ocupar un edificio en la misma Ciudad Vieja, aunque el proceso de adecuación y mudanza recién finalizaría el año próximo.
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