Aproximadamente la mitad de los seleccionados eran exPluna y al igual que muchos pilotos de la malograda aerolínea de bandera oriental son de los que prefirieron permanecer viviendo en Uruguay y no irse al exterior como lo han hecho la mayoría de tripulantes afectados por ese cierre.
Al igual que sus colegas dominicanos y peruanos, poco a poco fueron insertándose en las tripulaciones de los vuelos transatlánticos de Air Europa y en el caso de los uruguayos, cuando volaban a Madrid los martes y jueves, llegaban los miércoles y viernes sobre las 5.30 AM y debían presentarse nuevamente en Barajas, ese mismo día a las 22 para volar de regreso a Montevideo. En los vuelos de los sábados, llegaban el domingo 5.30 y recién se presentaban en Barajas para tomar servicio a las 22 horas del lunes. En todos los casos, el hotel utilizado para el alojamiento en Madrid era el Hotel Be Live City Airport Madrid Diana, un confortable establecimiento de negocios junto al aeropuerto de Madrid-Barajas e IFEMA, perteneciente al Grupo Globalia, a la vez popietario de Air Europa.
Sus salarios eran de unos 33 mil pesos uruguayos (viáticos incluídos) y los cobraban en los cajeros automáticos a través de cuentas de ahorro del HSBC.
De los 26 uruguayos, 9 tenían pasaporte comunitario (7 italianos, uno español, uno portugués) pero jamás tuvieron conocimiento que no estaban registrados como era debido y según pudo saber el PDA estaban convencidos que estaba todo en regla por tratarse de una megaempresa la que les contrataba.
Como consignásemos en el artículo Duró poco el sueño de los TCP´s uruguayos en Air Europa del martes 4 pasado apenas se dio la contratación de los "extracomunitarios" como se les encasillaba en la exmadre patria, los gremios de auxiliares de vuelo españoles presentaron sus denuncias ante la Inspección de Trabajo en lo que a primera vista se interpretó como una reivindicación eminententemente nacionalista aunque haya habido algunos que hasta pudieron catalogarla de xenófoba pero...sin desacreditar 100% la especie, estamos en condiciones de afirmar que la razón más contundente que motivó la reacción de los auxiliares hispanos fue otra y si se quiere, bastante entendible.
El peculiar estilo de Air Europa en el tratamiento de sus recursos humanos demuestra que los TCPs españoles no tienen efectividad en sus cargos y hay funcionarios de vuelo que tras 15 años en la empresa siguen siendo eventuales, con contratos semestrales continuados o alternados. No hace falta ser muy lince para imaginar como puede haber caído en los colectivos españoles que los extracomunitarios de buenas a primeras, tras tres meses de prueba pasaran a ser efectivos, de ahí su reacción, su accionar, sus reivindicaciones, las que finalmente tuvieron sus frutos recientemente como queda dicho.
Ya fueron liquidados los créditos laborales correspondientes (despido) a la totalidad de exauxiliares uruguayos de Air Europa por el estudio Fernández Secco de Montevideo y si bien se trata de una aerolínea española y los servicios fueron prestados en aviones de esa nacionalidad (o sea, territorio español), los 26 afectados pasan ahora a cobrar seguro de desempleo del Banco de Previsisón Social (BPS) de Uruguay, donde realizaron sus aportes.
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