El hotel es propiedad de Saceem, la empresa que lo construyó, la cual llegó a un arreglo de gerenciamiento por parte de la cadena Hilton. Está ubicado a la orilla de un lago originado en una antigua arenera. La edificación forma parte de un desarrollo inmobiliario de la empresa Saceem, que además del hotel comprende 6 torres de apartamentos, dos de los cuales se terminarán de construir este mismo año.

Vista del lago desde las salas de conferencias.

El perfil de los clientes será variado. Ya se está trabajando en conjunto con el aeropuerto de Carrasco aprovechando la cercanía. En el lobby del hotel habrá una pantalla conectada con la red del aeropuerto mostrando llegadas y salidas de vuelos.

También se trabajará el corporativo, especialmente por la cercanía con Zona América y el desarrollo empresarial que se está dando en las rutas 101 y 102. Una alianza estratégica con Punta Cala, tanto en eventos sociales como empresariales, e incluso potenciándolo como posible lugar de congresos y convenciones.

Dentro de las políticas de la cadena, los menores de 16 años acompañados por un mayor no pagan. Para una pareja con dos hijos, las habitaciones double-double, equipadas con dos camas matrimoniales, ofrecen una solución.

En cuanto a las tarifas, las actuales son de pre-lanzamiento. Todas incluyen desayuno, estacionamiento, wifi e internet de alta velocidad en todo el hotel. Se estima que el año próximo, cuando el hotel está en su madurez, las tarifas serán un 40% superiores.

El proyecto original del hotel fue adaptado tanto a los requerimientos locales, como a los rigurosos estándares de la cadena Hilton. Se incorporó un sistema de tecnología de avanzada. Este es el primer hotel en Sudamérica y el Caribe que tiene señal IP con cableado estructurado y no analógico en todo lo que es TV cable, así como sistemas de detección de fallas centralizado.

Desde enero de este año, Hilton centralizó todos  sus esfuerzos de servicio al cliente en los integrantes de su programa de fidelidad Hilton Honors, que tiene 68 millones de integrantes en todo el mundo. El objetivo es que el hotel sea rentable, que los miembros del equipo quieran trabajar en el hotel, y que los pasajeros lo elijan como primera opción. Actualmente, en Uruguay el 40% de los huéspedes en los dos hoteles ya instalados pertenecen a este programa, y la proporción sigue creciendo.

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