No podemos mentir y sentirnos impunes.
No podemos querer disfrazar la evasión del Estado al Banco de Previsión Social diciendo que el pago de salarios son donaciones.
Mucho menos decir que la evasión no es importante porque llega "apenas" a 3,5 millones de dólares.
No podemos, cuando no nos conviene hacer la de siempre, matar al mensajero, o respetando las cuestiones de género tan de moda, "matar a la mensajera (María Urruzola)".
No podemos gritar a los cuatro vientos durante más de una década que el turismo genera más de 100 mil puestos directos de trabajo y cuando recientemente el Foro Económico Mundial dice que apenas llegan a 47 mil no indignarnos y no salir a rebatir esa especie. Ni los funcionarios ni los comunicadores, nadie se indignó.
No podemos "poner a trabajar" a jerarquías ministeriales para conseguir expropiar padrones de bienes que favorecen un nuevo proyecto (de maqueta, porque obras...)de terminal fluvial en el Dique Mauá de López Mena, cuando este señor incumplió con la concesión del Puerto de Yates de Colonia y actualmente tiene un juicio contra el Estado por el final de la concesión de la terminal portuaria de Montevideo.
No podemos, quedarnos todos mudos e indiferentes cuando se van a cumplir tres años de que el expediente del "Caso Pluna" permanece intocado. Casualmente quedó "parado" después de que declaró Calvo Sanchez e involucró a López Mena y al gobierno de José Mujica.
No podemos, seguir sin investigar que es lo que fue a hacer a Venezuela, Mujica, acompañado de Bonomi, Pintado y Sendic en agosto de 2008. Lo hizo en un charter de Pluna que había reservado Gustavo Torena (el Pato Celeste), había garantizado su pago el por entonces presidente de ANCAP (y licenciado) Raúl Sendic y terminó pagando Nelson Gutiérrez, socio de Paco Casal en Tenfield con un cheque que el propio Torena le entregó a Campiani, como contamos en el capítulo 13, de la página 126 del libro Pluna, el riesgo de volar alto.
No podemos seguir haciendo oídos sordos al clamor popular con la pregunta ¿con qué tiene "atado" el gobierno venezolano al uruguayo que tan "frenado" está?.
Estuvimos el año pasado en Caracas y pudimos comprobar en vivo y en directo la angustiante situación del pueblo de Venezuela. De esa visita ya han transcurrido 16 meses, no podemos imaginar cuanto más se han deteriorado las condiciones en ese lapso.
Nadie nos podrá acusar de hablar por "boca de ganso", lo vimos con nuestros propios ojos.
Nos preocupa mucho la suerte de un pueblo y de una nación que han sido tan solidarios con nosotros los uruguayos cuando los necesitamos porque la cuestión era a la inversa y la dictadura estaba aquí.
Pero mucho nos preocupa la suerte de nuestro propio pueblo y de nuestra nación, la cual va directamente de la mano del éxito o del fracaso de sus gobernantes.
La imagen país no debe ser utilizada, tiene que ser cuidada por todos nosotros, es nuestra responsabilidad, como la de cuidar nuestra imagen personal, la de nuestros procederes, no la de nuestros "decires".
Por ello, a nuestra forma, nos sumamos a la brillante exposición del diputado Daniel Radío en el Parlamento, la semana pasada.
Portal de América