Como lo hemos expresado muy claramente en los artículos sobre este tema ya publicados en el PDA nos preocupa seriamente que sigan cercenándose las fuentes de trabajo en la aviación uruguaya y con el paso del tiempo nos indigna que las autoridades políticas no reaccionen y sigan sin caer en la cuenta que se impone con urgencia la reformulación de la política aeronáutica en nuestro país. Aquí nadie tiene idea para donde va la actividad, quien la rige y mucho menos quien la dirige.
Pero ese statu quo no le da derecho a los sindicatos a "ser pescadores en el río revuelto".
Una cosa son los puestos de trabajo que se pierden, lo cual -reiteramos- es un desperdicio de gente valiosa y con ello letal detrimento de la actividad y otra cosa muy diferente es que para reivindicarlos se pretenda instalar el "cuco" de la falta de seguridad porque los despachadores sean desafectados.
Ello carece absolutamente de veracidad.
Las RAU, la reglamentación anterior vigente en Uruguay, contemplaban desde principios de este siglo el despacho remoto, por lo tanto, no es novedad lo que ratifican las LAR.
No podemos hablar de degradación en los controles y la seguridad de las compañías extranjeras que operan en Uruguay cuando las mismas poseen autorización EASA (Europa) y son Categoría 1 para la FAA (Federal Aviation Administration de USA).
Para que se entienda mejor, en el comunicado se pretende instalar la idea que desde aquí, desde "el ombligo del mundo" nuestros técnicos controlen los planes que desde HACE MÁS DE TRES DÉCADAS envían los Centros de Control Operativo de las aerolíneas en sus casas matrices.
Hasta el pasado día 21, la función de los despachadores uruguayos era imprimir esos planes de vuelo enviados desde los OCCs y entregárselos a los tripulantes, pero actualmente algunas compañías adoptando el sistema "no paper" realizan electrónicamente la operación conectando directamente con los equipos que disponen las tripulaciones, inclusive todo lo relacionado a equipaje y carga.
La DINACIA no debe efectuar ningún estudio previo como plantea el comunicado, simplemente debe aceptar la documentación que viene certificada por las diferentes organizaciones de aviación civil de los países en donde están matriculados los aviones.
Las empresas uruguayas no pueden volar a Estados Unidos porque nuestro país no cuenta con la categoría que lo habilite, pero nuestros despachadores pretenden arrogarse el derecho de inspeccionar lo que hace la FAA y la EASA...
Desde el Portal de América una vez más expresamos nuestra solidaridad con los trabajadores de la aviación comercial uruguaya que han perdido sus puestos de trabajo y como siempre, estamos a la entera disposición de todas las partes para colaborar en la búsqueda de las soluciones que permitan minimizar el problema que lamentablemente, el desarrollo inexorable de la tecnología va causando en los recursos humanos en todo el mundo.
Pero paralelamente nos mantenemos muy firmes en sostener la verdad, aunque sabemos que en primera instancia nuestra actitud puede ser rechazada o criticada.
Nos parece mucho más importante trasmitirle a la opinión pública en general que el transporte aéreo sigue siendo cada día más, el medio más seguro del mundo.
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