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Algo debe cambiar en el relacionamiento interno de las aerolíneas
Jueves, 25 Mayo 2017 01:35

Algo debe cambiar en el relacionamiento interno de las aerolíneas

A pesar de que en aviación comercial el idioma universal es el inglés y debemos de dar por hecho que tanto los directivos, las jerarquías sectoriales y la generalidad de los funcionarios lo dominan, está claro que hay una enorme brecha de entendimiento. No vamos a manejar los ultramediatizados conflictos en Europa (Air France, Lufthansa, Iberia y demás) y tampoco los de Norteamérica con México como escenario más visible, ni siquiera los tan cercanos de la controvertida Aerolíneas Argentinas. A raíz de los últimos sucesos públicos que han involucrado a Copa Airlines, entendemos que es necesario encarar una primera mirada de su actual contexto, analizando hechos, actitudes y resultados. Antes de ingresar de lleno a la cuestión, creemos que corresponde decir que en nuestra opinión, las partes (LAS DOS, aunque suene perogrullesco) están obligadas a elevar la mira, actualizar sus arcaicos posicionamientos y entender que ha corrido ya, casi la cuarta parte del siglo veintiuno y casi todo ha cambiado: el negocio aéreo; el clima; las comunicaciones; la tecnología; las expectativas de vida; el disfrute del tiempo libre; los aeropuertos; los aviones; los viajeros; la seguridad; y muchísimas cosas más. Por todo ello nos parece poco creíble, cada vez que se suceden controversias entre empleadores y empleados, que sigamos asistiendo a una lucha de clases que por un lado hace que los patrones sigan aferrados casi a conceptos perimidos rayanos en el feudalismo y para sostenerlos no tengan ningún prurito en faltar a la verdad públicamente y los funcionarios técnicos por su parte, que sigan blandiendo reivindicaciones obsoletas, inaplicables, inentendibles y también sin ningún problema, sin medir las consecuencias, expresen públicamente mayúsculos disparates.

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por Sergio Antonio Herrera, desde Salinas, Uruguay - @DelPDA en Twitter

 

 

El tema de los pilotos de COPA

Es cierto que una empresa latinoamericana del porte de Copa Airlines no puede pagar salarios del nivel de las principales aerolíneas norteamericanas ni europeas y muchísimo menos, ni por asomo, lo que pagan las de Medio Oriente o las chinas por ejemplo. Pero también es cierto que cuesta entender que ante reivindicaciones salariales del orden de más del 40 o 50%, ofrezcan un 1,5% y digan públicamente que están avanzando en la negociación.

La empatía palpable entre Copa Airlines y el Estado panameño justifica por un lado el exponencial crecimiento de la aerolínea en un corto lapso de tiempo histórico y por el otro, un significativo aporte al PBI nacional merced al enorme flujo que se genera a través del Hub de Las Américas. De ese modo, el "hijo pródigo con alas" puede darse el lujo de decirle en definitiva (aunque aparezca edulcorado en lo formal) a sus pilotos, que pueden decretar la huelga anunciada pero que el Ministerio de Trabajo puede dejarla sin efecto de inmediato...

Dadas las condicionantes tan particulares impuestas de hecho en Panamá, a través de un endémico déficit educacional generalizado y la postergación social en consecuencia, en muchas actividades el empresariado local prefiere la contratación de recursos humanos extranjeros, especialmente colombianos y últimamente, por obvias razones, muchos venezolanos, aunque en realidad no podríamos precisar si han ingresado más trabajadores que inversores tácitamente expulsados por el régimen bolivariano (o chavista-castrista-madurista). En ese contexto, sumado a la escasez de pilotos comerciales en el mundo entero, Copa Airlines se ha visto obligada, a partir del mencionado desarrollo exponencial experimentado, a contratar profesionales venezolanos, argentinos, uruguayos, mexicanos, norteamericanos y europeos, entre otros. Así las cosas, actualmente hay más extranjeros que pilotos panameños en la compañía, a tal punto que exceden con creces la ley vigente de extranjería que limita a un máximo de 15% a los foráneos. Para lograrlo, además de ceñir ese "techo" al total de la plantilla (no exclusivamente al rubro pilotos), COPA se comprometió ante el Estado a fundar una Academia de Pilotos propia (la cual funciona muy bien).

Sean de la nacionalidad que sean, a los pilotos de COPA se les descuenta de sus haberes, religiosamente, mes a mes, la cuota de UNPAC (Unión Panameña de Aviadores Comerciales) pero aunque cueste entenderlo, solamente los panameños tienen voz y voto en la gremial.

Si al hecho ya relatado de la singular empatía Estado-COPA, le sumamos que además los accionistas que manejan la empresa (la familia Motta), apoyaron electoralmente a las actuales autoridades nacionales y a ese combo lo hacemos coincidir con la divisón sindical entre pilotos panameños y extranjeros, no hace falta ser muy erudito para vaticinar dos posibilidades: la primera, que aunque se decrete la huelga antes del 6 de junio próximo la misma puede durar lo que un lirio o la otra, que se instale la huelga y en los hechos -por la ley del artillero- se divida la reacción de los pilotos entre nacionales y foráneos y en esa hipótesis, no nos animamos a vaticinar el resultado, podría pasar cualquier cosa.

 

Los tres despachadores de vuelo cesados en Uruguay

 

Como informamos detenidamente en forma exclusiva el 23 de abril pasado en Cuando se confunden los derechos sindicales y se usa "el cuco" de la seguridad en la aviación al cesar, según las LAR (reglas vigentes en la aviación comercial uruguaya) la función de los EOV (Despachadores de vuelo), Copa decidió despedir a los tres funcionarios que cumplían esa función. Suponemos que es una determinación de la autoridad de la base aeroportuaria local con el aval de RRHH central, lo cual a simple vista no parece una medida ni muy pensada ni muy acertada. En la misma situación, conocemos que al menos otra de las aerolíneas que operan en el país, redistribuyó en su plantilla a los despachadores de vuelo. En aquella oportunidad ya se había emitido un comunicado por parte de la gremial local AUDEV, firmado por su presidente Gabriel Infante, que originó nuestro artículo mencionado a partir del título: "Degradación de la seguridad en la aviación comercial uruguaya", lo cual entendíamos falso y como un recurso absolutamente inútil.

Este miércoles 24 de mayo, volvió a circular otro comunicado de la AUDEV, esta vez sin firma, redoblando la apuesta, motivando nuestro artículo Infeliz e irresponsable comunicado de AUDEV respecto a seguridad de COPA AIRLINES en el que entre alguna otra inexactitud, se afirmaba: "...como Asociación Profesional, consideramos que COPA Airlines se ha convertido en la aerolínea más insegura que opera en nuestro país; y que el menosprecio por la Seguridad operacional explicitado con esta medida, puede poner al país en una grave situación de riesgo potencial de un incidente o accidente aéreo."

Ratificamos nuestra calificación acerca del comunicado y podemos afirmar que el mismo ha generado un entendible malestar en varios ámbitos del sector, incluyendo obviamente a la propia Copa Airlines Uruguay y a las autoridades aeronáuticas.

Las consecuencias de esta insólita comunicación, son insospechadas y pueden llegar a tener hasta responsabilidad civil y penal.

No se puede afirmar tan livianamente acusaciones de tal magnitud como protesta o despecho por tres despidos.

Cualquiera puede entender y hasta compartir la molestia de los despedidos como en su oportunidad, escribimos que la entendíamos nosotros mismos, pero de allí a medrar recurrentemente con el fantasma de la seguridad, máxime contra una aerolínea que vuela a diario a más de 74 destinos con un centenar de aviones y cumple a rajatabla con todos los requerimientos de los más rigurosos estándares de seguridad, es como dijimos más temprano, por lo menos infeliz y de una irresponsabilidad mayúscula.

Muchas veces hemos utilizado en nuestras crónicas a Panamá y a Copa Airlines como ejemplo de que a pesar de la pequeñez territorial (menos de la mitad que Uruguay) y la escasa población (similar a Uruguay), pudieron generar el exitoso Hub de las Américas, desarrollar enormemente la aerolínea y aportar significativamente al destino turístico y por ende, al Producto Interno Bruto.

Siempre que cualquier sindicato de funcionarios de la aviación comercial nacional o regional lo ha solicitado (y aún sin solicitarlo), las puertas de nuestro sito han estado abiertas de par en par para informar acerca de sus dificultades, sus reivindicaciones o sus inquietudes y la multiplicidad de ejemplos están en nuestro archivos.

Por lo tanto, nos sentimos con la autoridad moral e intelectual suficiente como para sugerirle a todas las partes que recapaciten, que abandonen las arcaicas posturas inconducentes y que prioricen lo más parecido al bien común.

Las sogas, por más fuertes que sean, cuando se tensan en demasía, invariablemente se rompen.

 

Artículo relacionado: El fin de los EOV (despachadores de vuelo). Todas las voces todas

 

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