por Luis Alejandro Rizzi en Buenos Aires

Además configuran un clima de buena onda en el cual me siento muy cómodo.

Quizás porque considero que el agente de viajes debe ser un profesional en el sentido cabal de la palabra, expresaré mi juicio crítico sobre algunos aspectos de la actividad.

La profesión de agente de viajes entró en grave crisis cuando las empresas aéreas comenzaron a reducir las comisiones hasta llevarlas a "cero” como si el único sustento de la actividad fueran esas comisiones o el transporte aéreo.

Más de una vez expliqué que el nivel de las “comisiones” era intolerable para las líneas aéreas y más de una vez expliqué como fracasé en Aerolíneas Argentinas para incrementar las ventas directas y disminuir el nivel de las comisiones.

Es cierto, internet y el “low cost” cambiaron el escenario y de un día para otro las líneas aéreas o algunas de ellas vieron que podían abrir nuevos canales de venta que a su vez les permitía reducir sustancialmente los costos de comercialización.

A partir de ese momento muchos consideraron que la profesión de agente de viajes era superflua o condenada a desaparecer como ocurrió, por ejemplo, con los técnicos  o ingenieros de vuelo, los radio operadores, los foguistas en los ferrocarriles cuando se dejó de utilizar el carbón como combustible y con muchas otras profesiones u oficios que se volvieron innecesarias.

Es cierto, según me decían días pasados podrían haber cerrado casi la mitad y según parece muchas de ellas no pudieron soportar la pérdida de la comisión aérea.

Lo cierto es que últimamente he advertido muchas falencias en la actividad, dejando  de lado los casos en los que se actúa con mala fe como pasa con todas las actividades que desarrolla el hombre.

Pondré algunos ejemplos.

COMERCIALIZAR VUELOS CHARTER NO AUTORIZADOS

En esta temporada hubo agentes que sufrieron pérdidas importantes por haber comercializado paquetes con transportadores que aun no habían obtenido las autorizaciones por parte de la Dirección Nacional de Transporte Aéreo de la ANAC.

Los vuelos “charter” tienen un régimen especial y deben ajustarse al mismo, debiendo terminar la práctica viciosa de tramitarlos como “no regulares” ya que ello significa una ventaja en perjuicio de quien cumple con la normativa vigente.

Se utiliza la vía del “no regular” ya que el trámite de la autorización solo requiere cinco días hábiles previos al vuelo contra el chárter que debe iniciarse con 40 días de anticipación.

Esta diferencia de trámite es lógica ya que el vuelo “chárter” no usa derechos de tráfico contrariamente a lo que ocurre con el vuelo “no regular”

El agente no puede comercializar paquetes hasta luego que el transportador le confirme la obtención del respectivo permiso.

Pues bien la impaciencia o la falta de asesoramiento adecuado hace que muchas veces se comercialicen “paquetes” sin que el transportador aéreo haya logrado las respectivas autorizaciones.

Hubo varios casos durante este año en que Agentes contrataron de buena fe con transportadores que carecían de los permisos y sobre el momento del viaje tuvieron que hacer nuevas contrataciones para evitar el escándalo de dejar a sus pax en tierra.

En estos casos el Agente no solo debe obrar con suma prudencia sino también con máxima profesionalidad para evitar sufrir quebrantos evitables o largos juicios para recuperar dinero y en su caso como reparación de daños y perjuicios.

EL CASO AIR MADRID o AIR COMET

Muchos agentes vendieron AIR Madrid o AIR COMET hasta una semana antes de su colapso cuando en el mercado se sabía que la situación era insostenible, mas aun hubo casos de Agentes que ofrecían esos billetes como una gran “ganga”.

Luego cuando la gente se encontró con el cierre de las empresas c creo que ningún agente asumió su responsabilidad ante los clientes los que tuvieron que participar del largo proceso de quiebra o cesación de pagos.

EL CARGO POR VARIACION DEL PRECIO DEL COMBUSTIBLE

Es común que las líneas aéreas fijen un cargo para cubrir la diferencia de precios del combustible especialmente en los vuelos “chárter”. Esto tiene una explicación.

Los contratos para realizar ese tipo de vuelos se suscriben con una anticipación de tres a seis meses a la fecha de inicio de los vuelos y resulta casi imposible fijar una tarifa definitiva cuando el precio del fuel puede variar en porcentajes importantes.

Por tal motivo se fija un precio por las rotaciones contratadas (vuelos de ida y regreso) y se fija una base para el precio del combustible  que se ajusta generalmente sobre la fecha de salida de cada vuelo contratado.

Generalmente también es la línea aérea la que informa al agente de viajes el precio de ese cargo.

Sin embargo el agente de viajes también tiene la obligación de ir monitoreando la variación del precio del combustible ya que es un precio que traslada al viajero y lo debe percibir antes de que se emprenda el viaje.

El valor de ese cargo nunca es matemáticamente exacto pero si se toman las previsiones será difícil que la variación del cargo origine una pérdida al agente.

Es común escuchar entre los agentes que no tienen porque conocer el precio del combustible o sus variaciones, sin embargo ese precio es un insumo muy importante que podría determinar la suerte de una contratación.

Actualmente he tenido a la vista casos en que el precio del combustible, desde la fecha que se firmó el contrato “chárter” hasta el día del vuelo, tuvo variaciones de casi un 15% que significan una diferencia de u$s 100,00 en el precio de un paquete EZE VRA. En una familia tipo ese cargo pude significar u$s 400,00 valor suficiente para que el viajero opte por otra alternativa o que llegado el momento no le pueda hacer frente con el riesgo de perder lo ya pagado.

Es función del Agente advertir al cliente sobre las variaciones que puede tener el precio del paquete ofrecido, salvo que ya haya asumido la eventual diferencia y se beneficie o perjudique según evolucione el precio del “fuel”.

Queda claro que no puede hacerse el desentendido en una cuestión íntimamente vinculada a su actividad profesional.

Siguiendo con esta saga de ejemplos el último.

LA CUESTION DE LA DOCUMENTAICON NECESARIA PARA SALIR DEL PAIS

En EZE he visto varios casos de personas con dificultades e imposibilidades para embarcar por defectos o carencia de documentación idónea.

Es cierto, la mayoría de la gente sabe que necesita tal o cual documento para salir del país, pero también hay mucha gente que lo ignora.

La persona que no puede embarcar pierde todo lo pagado, es la ley del chárter, pero también es cierto que el Agente considera que cumple con su función de asesoramiento entregando una hoja de papel perdida entre los Boucher en la que se detalla la documentación necesaria.

En ese punto juega la sensibilidad del vendedor para advertir que hay personas que ignoran totalmente la cuestión y que una hoja como la que se suele entregar con toda la documentación del viaje es totalmente insuficiente.

La profesionalidad tiene que ver con todas estas cosas, el Agente no solo debe estar informado de todo lo que se relaciona con su negocio especifico, sino también con todo aquello que impacta en el precio del servicio ofrecido, al tiempo que debe dar al cliente todo el asesoramiento necesario para que el viaje no termine frustrado por un defecto en la documentación del pax.

Seguiremos con el tema y espero que estas críticas nos hagan pensar sobre nuestras obligaciones de ese modo el turismo saldrá fortalecido.

Portal de América

imagen: www.quia.com