Flybondi: un comienzo azaroso
Domingo, 18 Marzo 2018 10:40

Flybondi: un comienzo azaroso

“…Desde el 26 de enero, cuando realizó el vuelo inaugural, Flybondi -la primera low cost argentina-modificó 156 vuelos(incluyendo rutas hasta el 31 de este mes)- y canceló el 17%: debería haber completado 404 rutas y voló efectivamente 334. Hasta fin de mes se sumarán otras 54 cancelados que ya se conocen…”. La Nación.

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por Luis alejandro Rizzi, desde Buenos Aires

 

La crónica es elocuente y lo primero que se nos ocurre es señalar un fracaso gerencial, ya que la suma de cancelaciones, modificaciones y demoras acreditan la puesta en vigencia de un programa de vuelos imposible de realizar, máxime si en un comienzo la empresa disponía de una sola aeronave, cuya antigüedad debió hacer presumir imprevistos técnicos que entorpecerían la prestación del servicio de transporte, en especial, servicios regulares sujetos a horario e itinerario prefijados y publicados.

 

Otra muestra de imprudencia, imputable también a la ANAC y al ORSNA, es la autorización, limitada por cierto por un Juez Federal, a tres despegues/aterrizajes diarios, para operar en el aeropuerto de El Palomar (EPA). Ello también es una muestra de desaprensión por parte de la empresa ya que la limitación, también operativa de EPA, hizo que algunos vuelos tuvieran que operar en EZE y AEP.

 

No cabe duda que se trata de un mal comienzo agravado por las pobres y desafortunadas explicaciones dadas por su CEO Julian Cook para justificar los incumplimientos.

 

Cuesta creer que la ANAC haya aceptado el inicio de actividades por parte de la empresa con solo avión, máxime teniendo en cuenta una muy ambiciosa y justa programación.

 

Tampoco parece que el inicio haya sido auspicioso con un promedio de ocupación del 70%.

 

Intentamos reunirnos con el Señor Cook a quien he tratado en dos o tres oportunidades, para conversar sobre estas improvisaciones que dañan de algún modo al transporte aéreo y que dejan muchas dudas sobre la seriedad del proyecto, pero hasta ahora no ha sido posible, como si se pusieran en duda nuestra buena fe o como si ese pedido de entrevista escondiera segundas intenciones, hecho que lamentablemente suele ocurrir cada tanto.

 

Recuerdo que hace años, siendo vicepresidente de una importante empresa, llamaron por teléfono desde un programa radial, y luego de la entrevista se hicieron algunos pedidos de publicidad y de provisión regular de nuestros productos, por eso comprendo las dudas.

 

También resulta llamativa la presencia del Ministro de Transporte como respaldando de modo oficial la modalidad operativa de Flybondi, como otro capítulo de la llamada “Revolución de los aviones” que si se pretende reflejar en este caso, demostraría una vez más que la mayoría de las revoluciones fracasan y que las que triunfan, también.

 

Por último lo venimos diciendo desde hace años, el llamado “low cost” necesita condiciones o externalidades que no existen en Argentina, una de ellas la inexistencia de límites tarifarios, aeropuertos alternativos lo que podría suplirse con tarifas aeroportuarias diferenciales, previsibilidad económica, bien inexistente en la Argentina, y niveles de desregulación comercial que hoy no existen dado que la regulación está fijada por leyes nacionales, que obviamente se incumplen, como el principio de la propiedad sustancial, groseramente vulnerado en la actualidad, y los privilegios que tiene Aerolíneas Argentinas concedidos por la ley 19030.

 

Como conclusión, no fue bueno el comienzo de Flybondi, su gerenciamiento ya debería haber ocasionado cambios y suponemos que en este breve lapso debe haber acumulado pérdidas difíciles de recuperar en el resto del año.

 

Una lástima por la empresa y por las autoridades aeronáuticas argentinas.


Portal de América

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