La presión gremial sobre el transporte aéreo
Viernes, 13 Agosto 2010 06:22

El transporte aéreo es susceptible a cualquier perturbación por mínima que ella sea y las consecuencias se traducen rápidamente en pérdidas que afectan obviamente los resultados.
TSTT-1250x115
Fiexpo 2024 1250x115
Mintur verano 1250x115
Arapey 1250x115
CIFFT 1250x115

por Luis Alejandro Rizzi desde Buenos Aires
En los últimos diez años el transporte aéreo debió afrontar varios hechos desfavorables cuyo inicio lo situamos en el 11/09/01; luego se sucedieron otros  como la Gripe H1N1, la crisis económico-financiera, la nube volcánica,  por solo mencionar los más salientes.
Sin embargo últimamente surge otro hecho cuyas consecuencias parecería que aun no han sido medidas ni por los gobiernos ni por los trabajadores ni por las propias empresas, me estoy refiriendo a la “presión gremial”.

Veamos algunos casos y empecemos por casa.

Aerolíneas Argentinas es una empresa que en cualquier país, salvo Venezuela y quizás Ecuador hubiera quebrado hace tiempo. En la década del 90 tuvo que ser privatizada ya que ni la propia empresa podía mancarse ni lo podía hacer el estado.
En 2001 se presentó en concurso y pudo sortear esa instancia judicial merced al aporte del tesoro español y a varias anomalías ocurridas en el trámite concursal que fueron toleradas por la Justicia y por el Estado.
Finalmente en 2008 debió ser estatizada de modo muy especial, aunque aun esta pendiente de resolución el proceso de expropiación, ya que en caso contrario hubiera quebrado.
La privatización de los 90 fue tolerada por los gremios ya que creo que en conciencia esa decisión del gobierno era la única que permitía mantener a la empresa en actividad.
Luego los gremios jugaron un papel decisivo para que la empresa continúe “en el aire”. El gobierno tanto en 2001, como en 2008 y ahora no pudo o no supo afrontar la embestida gremial y aerolínea subsiste merced a los casi un millón y medio de dólares diarios que aporte el estado o mejor dicho todos los argentinos que pagamos impuestos.
En este caso la “presión gremial” es causa de un gasto improductivo según mi modo de ver que a la vez impide pensar en soluciones racionales si es que se llegara a considerar que para poder ejecuta runa política de estado en materia de transporte AEROLINEAS ARGENTINAS debe ser protagonista esencial.
De paso agreguemos que la “presión gremial” provocó la renuncia del administrador General de la ANAC y parecería que asimismo condicionará la política aérea del estado.
Vayamos al Reino Unido y la cuestión “British Airways”.

Leía días pasados en el periódico económico español “Cinco días” que “…el sindicato Unite asegura ahora que continuará sus huelgas tras la fusión "si es necesario". Unite representa a 11.000 trabajadores de los 13.400 que componen el personal de cabina de BA. "Si el conflicto continúa, Iberia podría encontrarse con que se ha aliado con un socio mucho más débil y problemático del que era cuando comenzó el proceso de fusión. Incluso si logramos que el conflicto termine mañana, calculamos que BA tardará unos cinco años en restaurar la confianza de sus clientes", dice Olivier Richardson, delegado de Unite para Bassa, la sección del sindicato que representa a los TCP, presente en las negociaciones.”
Esta declaración del dirigente gremial demuestra que UNITE es plenamente conciente del perjuicio causado por los 22 días de huelga  ocurridos desde enero pasado y que podrían reiterarse en cualquier momento.
En este caso, opuesto al de Aerolíneas Argentinas, el gremio origina pérdidas económicas a la empresa y lo más grave afecta negativamente su confiabilidad cuyas consecuencias parecen no haberse dimensionado adecuadamente por los propios sindicalistas.

En junio el tráfico “business” de BA cayó un 9,5% y el de “economy” rozo el 12%. Esta caída también afecta al personal de la empresa ya que obliga a la empresa a reducir aun más sus gastos.
Sin embargo la “presión gremial” se dirigió también a los accionistas de BRITISH para que presionen a los directivos de la empresa para que resuelvan el conflicto lo que parecería significar, en beneficio de UNITE y según vengo leyendo los días de Willie Walsh podrían estar contados.

En España los controladores de vuelo también mantienen un conflicto con AENA y recientemente,  al suspender una huelga programada para la segunda quincena de agosto, un dirigente gremial decía: "Hemos hecho un ejercicio de responsabilidad y hemos demostrado un gran sentido de Estado. Como ya hemos reconocido la huelga era mala para el turismo, para la recuperación económica, para los usuarios que están pendientes de irse de vacaciones y para los propios controladores porque nuestra imagen se deterioraría todavía más de lo que se ha deteriorado con las constantes campañas a las que hemos estado sometidos".
Esta declaración tiene un especial significado porque pareciera reconocer un límite a las acciones gremiales y ese límite estaría dado por los perjuicios que puede originar o causar un paro no solo al entorno del transporte aéreo sino a los propios huelguistas.
El conflicto de los controladores también puso en vilo al transporte aéreo internacional ya que en la UE un paro de estas características afecta a personas y empresas de otros países miembro.

En México la intransigencia gremial casi lleva a la quiebra a MEXICANA de Aviación ya que la dotación y las condiciones laborales laboral vigentes en  la empresa eran insoportables  no solo en comparación con el resto del transporte aéreo sino para las posibilidades económicas de la propia empresa.
Decimos casi porque podría aparecer un grupo financiero que tomaría a su cargo la gestión de la empresa siendo muy probable que se realice un ajuste para intentar su recuperación que obviamente afectará a los trabajadores que también verán disminuida su nómina.
Obviamente hubo otros casos en los que la “presión gremial” también causó perjuicios, algunas veces irreparables, a las empresas de aviación.
Lo cierto que parecería ser que los gremios solo admiten mantener o acrecentar derechos sin discutir ni negociar en torno a las obligaciones.
Los derechos y las obligaciones son dinámicos ya que la efectividad de los derechos laborales depende de la viabilidad empresaria ya que en los casos de insolvencia los derechos se esfuman como el agua en un puño cerrado.

Derechos efectivos son los que se pueden ejercer y gozar en el plano de la vida diaria, los que carecen de esa virtud son meras “hojas de papel” absolutamente inservibles.
Estimo que los estados o mejor dicho los gobiernos deberán legislar un régimen legal que regule el conflicto gremial y que fije las condiciones  que deberán cumplir los  gremios para declarar un paro de actividades y las sanciones aplicables para los dirigentes que no cumplan con esas eventuales obligaciones.

Recordemos quizás el único derecho absoluto sea el derecho a la vida desde su concepción hasta la muerte natural; los demás derechos  están condicionados a las leyes que regulan su ejercicio, en caso contrario viviríamos en un estado de anarquía total.
 
Portal de América




Escribir un comentario

Promovemos la comunicación responsable. No publicamos comentarios de usuarios anónimos ni aquellos que contengan términos soeces o descalificaciones a personas, empresas o servicios.