Diálogos con un gay y el turismo
Miércoles, 11 Agosto 2010 00:08

Estaba almorzando el pasado sábado en “Edelweiss” en la calle Libertad entre Corrientes y Lavalle, con dos amigos, mi mujer claudia se había quedado en el estudio terminando un balance.Éramos muy pocos los “parroquianos” y pienso que por ese motivo era fácil que nuestra conversación se escuchara por los otros comensales.
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por Luis Alejandro Rizzi desde Buenos Aires

Estábamos aun con nuestro aperitivo, el clásico Negroni, cortesía del restaurante acompañado por un riquísimo jamón crudo cortado en fetas muy finas y rodajas de diversos tipos de pan negro, mientras conversábamos y discutíamos sobre la nueva ley de matrimonio o para ser más claro sobre el derecho a contraer matrimonio por personas del mismo sexo.

Enrique, un viejo amigo que ya pasó la curva de los 65 años, no podía ocultar su oposición y su disgusto por la nueva ley al tiempo que no se privó de hacer dos o tres comentarios muy despectivos sobre la homosexualidad.

Oscar, el otro de mis amigos, profundamente católico pero también de formación liberal, planteó el tema desde una perspectiva religiosa y otra civil y en cierta forma su único desacuerdo era con la forma legal ya que opinó que se debería haber legislado una suerte de “unión civil” con todos los efectos del matrimonio para las parejas homosexuales.

“La homosexualidad es un hecho”, dijo mientras elegía costillas de cerdo ahumadas con chucrut y un “TERRAZAS” Malbec para acompañar el almuerzo.

“No es justo que se apropien de una institución que es del hombre y la mujer”, hizo una pausa y agregó “…es como si mañana los basquetbolistas se hicieran llamar “futbolistas” o los podólogos “médicos” o que se yo”…!

“Esa pretensión denota mas una debilidad que otra cosa ya que hace suponer que una “unión civil” sería vista como un premio consuelo o como un acto de caridad de la sociedad civil, sin que se den cuenta que aunque le llamen “matrimonio” mucha gente no los considerará como tal, es decir como “marido y marido o mujer y mujer””.

Les hago una pregunta ¿se tiene derecho a la homosexualidad? O de otro modo: ¿la homosexualidad puede convertirse en valor y en derecho humano? Les anticipo, creo que se trata de una desviación, más que de una orientación, como dije, es mi opinión. Esto no implica menoscabo alguno pero la persona homosexual, debe asumirse como tal y en todo caso proponer una legislación para tutelar los derechos de esa minoría…porque la homosexualidad constituye una minoría, esto hay que tenerlo en cuenta, no son mayoría… En estos debates hay más hipocresía que sinceridad porque se tomó el tema para estar en contra de…, se tomó como motivo, no se tomó como “problema” o “cuestión”. Esto nos pasa con todos los temas y es una muestra de la superficialidad cultural del momento.

Si la homosexualidad constituyera una orientación, continué, entonces tendría que estar incluida en los programas de educación como una alternativa validada y virtuosa de vida para la persona…

Aun no había elegido mi plato cuando se acercó una persona a nuestra mesa de notorio perfil homosexual y con enorme simpatía y autenticidad pidió “participar” de  nuestros comentarios e interpretando a  mis amigos  lo invité a sumarse a nuestro almuerzo.

Se presentó como Claudio, dijo tener 45 años y nos aclaró que en este momento estaba solo.

Enrique con un dejo de grosería y de agresividad que Claudio cuidadosamente pasó por alto, le preguntó:

“Porque te hiciste homosexual…”

“Bueno no me hice, soy”, le aclaró. Enrique no pudo ocultar su sorpresa por el tenor de la respuesta.

“¿Y tus padres…?” preguntó nuevamente Enrique.

“Tuve mis problemas, no es fácil para una familia tradicional tener un hijo “maricón” como se decía hace 40 años…”; se hizo una pausa sin que ninguno de nosotros intentara decir palabra alguna y Claudio continuó, a esta altura se había convertido en el centro del almuerzo:
“dos veces me echaron del colegio primario pese a que llegué a estar en el “cuadro de honor” en esa época existían los “cuadros de honor”, pero el resto de los chicos me hacían o hicieron la vida imposible…”

“Pero estas ya son anécdotas ahora puedo decir que soy gay y la gente me respeta y entiende…”

“¿Entiende?”, pregunté y rematé: “no te entiendo…”

“Vos soy Luis, ¿no?”,  respondí con un gesto, y concluyó: “Vos no necesitas ser “entendido” por los demás, nosotros si, porque como escuché antes, somos una minoría y las minorías tiene que ser entendidas, si no son entendidas no son respetadas y si no son respetadas no se les conceden o reconocen derechos…”.
Es lógico lo que decís, respondí mientras pensaba para mi: “Este tipo es brillante”.

“Yo les quería decir otra cosa que también tiene que ver con la hipocresía nosotros somos mas del 10% del turismo mundial y además de elite, de alto poder  de consumo, nosotros los gay somos un excelente negocio, por eso nos aceptan, no se engañen”.

Oscar, asintió “Tenés razón…ustedes son un negocio…”

“En EE.UU. movemos siete mil millones por año o más”, dijo Claudio, durante unos segundos quedó pensativo y continuó “…¿por qué creen que en México invitaron a la pareja homosexual que se casó el otro día en Santiago del Estero…?”, el mismo respondió, “…porque nos necesitan, la Secretaria de Turismo del México dijo el otro día en un programa de Televisión que nosotros somos mas gastadores que  “ustedes” por los heterosexuales”.

Entonces, pregunté…y sin llegar a completar mi pregunta, Claudio, me respondió como si hubiera leído mis pensamientos “…la competencia por nosotros ya está lanzada y nos van a tener que reconocer hasta los talibanes…”, hizo una estudiada pausa mientras nos semblanteó a cada uno de nosotros para agregar: “…y los que no nos reconozcan se perderán el negocio gay…es mucha GUITA”.

“Entonces lo de ustedes también tiene algo de hipócrita, en definitiva juegan con la ambición, mas que con valores o derechos…”, le respondí.

“Es el capitalismo, Luis, son las reglas de juego, ¿vos crees que si no tuviéramos poder económico se estarían reconociendo nuestros derechos… sos tan ingenuo…?”

Mientras hablábamos fuimos consumiendo el “jambonon” también con chucrut con una segunda botella de TERRAZAS.
Claudio se disculpó y se retiró nos dijo que tenia un compromiso.

Nosotros nos quedamos sorprendidos, Claudio nos dejó una tarjeta a cada uno con sus datos personales tomé la mía y la guardé en mi carterita pensando que lo llamaría o cuando menos le enviaría algunos mails…

“Se abrió la era del comercio  gay”, dijo Oscar.

“En verdad no nos hemos dado cuenta de algo -comenté-, son las posibilidades de la libertad, uno elige y eligiendo se progresa, aunque se elija mal”.

Pedimos la cuenta y el mozo nos dijo: “El señor que se retiró pagó todo”.

“Estos tipos tienen guita en serio”, comentó Enrique.

No tenia porqué habernos invitado, ¿no?, pregunté mientras  decidí que volvería a mi estudio caminando por Córdoba, serian unas diez a doce cuadras, Oscar me acompañó hasta Córdoba y Callao, Enrique se tomó un taxi, vivía en Devoto.

Nota de Dirección:
A nuestro compañero y amigo Luis, además de su especialidad, la aviación comercial, le gusta escribir y entre lo que escribe, lo hace sobre temas diversos entre los que incluye la economía, la política y algunos más de interés general. Cuando editábamos solamente el Portal del Uruguay, publicábamos sin ningún cuestionamiento, todos los artículos que nos enviaba. Desde el 22 de febrero del corriente 2010, con el Portal de América, tomamos la decisión de ceñirnos a un perfil especializado en turismo y aviación comercial exclusivamente. En ese contexto, le pedimos a Luis que él también hiciese lo propio. Pero no puede con el genio; hace algún tiempo nos mandó una nota en la que pasaba por el tema Malvinas y ese, un tema tan sensible para mucha gente, provocó comentarios, reacciones e inclusive, hasta algunas amenazas de algunos lectores. Cuando comenzamos a leer el presente artículo, hasta que promediaba la lectura, habíamos decidido no publicarlo por tratar un tema también de alta sensibilidad que se presta para muchas interpretaciones. Pero muy hábil, como buen abogado que es, metió en el remate del artículo el tema turismo y de esa manera, de algún modo justificó su envío. Consideramos que el tema del turismo gay es un dato de la realidad y merecedor del más amplio estudio, de ahí su publicación. Nos adelantamos a recordarles a todos los lectores, que como editores del PDA en primera instancia pero, más importante, como seres pensantes, habitantes del planeta tierra, no hacemos ninguna diferencia con ningún sector de la población por cuestiones de raza, credo u opciones sexuales y que, como queda expuesto, en el espacio de los columnistas: "Las opiniones vertidas por los autores en esta sección, son de exclusiva propiedad y responsabilidad de los columnistas y no necesariamente, reflejan la idea u opinión del medio. En el Portal de América, la única regla que rige para los colaboradores, es la de observar el decoro y las buenas costumbres". Por lo tanto, los comentarios que genere este artículo, siempre que también respeten el decoro y las buenas costumbres, serán publicados pero de ninguna manera, provocarán la polémica con esta dirección en tanto no sea sobre el enfroque turístico de la cuestión.

Portal de América

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