por ElBis Turí
Después de la faena de Tabárez y sus muchachos en tierras de Mandela, después que a Uruguay lo catapultan al primer lugar en el Índice de Clima Económico (ICE) elaborado por la Fundación Getulio Vargas y el instituto alemán Ifo, la Armada aparece Desarmada y desdeñando al Gran Bonete, en el Parlamento, "nadie fue" el que derogó la ley que dejó a los protagonistas del "Robo del Siglo" sin antecedentes penales.
Dan vergüenza ajena las declaraciones y las apariciones de Abreu y Fernández y a uno, en su Partido, le piden que renuncie y al otro, "para la tribuna", galvánico respaldo, mientras en la real, "el viejo" del MPP le pide juicio político.
Y todo esto, una vez más y cuando no, se sabe, sale a luz pública, gracias a la investigación periodística de los colegas de Brecha, el semanario de izquierda, el semanario independiente.
El Consejo de Redacción de Brecha, en su última edición,en la que publica una carta de Gonzalo Fernández y a la vez, demuestra, luego de acceder al expediente del caso Peirano, el involucramiento del estudio del ex Canciller con el pedido de derogación del expediente, al final de la cobertura, firma un artículo en cuyo remate dice: "No nos extraña entonces que, antes que reconocer la cadena de errores y desprolijidades propias, varios hayan optado por el anticuado mecanismo de atacar al mensajero. No nos quejamos, ya que los ataques que en los últimos días se han dirigido contra Brecha son posibles porque carecemos de padrinazgo. Los ataques recibidos -que no son nuevos- implican, en ese sentido, una prueba más de nuestra independencia. Porque el periodismo, cuando es verdaderamente independiente, siempre va de la mano de la orfandad.
Para entender lo de la vergüenza ajena, les invitamos a ver el video de la conferencia de prensa del Senador Abreu y el patético final, ante la pregunta del colega Samuel Blixen.
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