por Sergio Antonio Herrera, desde Buenos Aires


Vinimos como habitualmente en Colonia Express con un servicio que realmente han logrado estandarizar en un muy buen nivel. Puntualidad, confort y cordialidad son características indiscutibles de este servicio.

El alojamiento merece un capítulo aparte que con gusto compartiremos en breve. El Hotel Pestana Buenos Aires es un lugar ideal para quienes como nosotros llegamos a esta ciudad en plan de turismo. La ubicación en Carlos Pellegrini entre Córdoba y Paraguay, hace que todo quede equidistante, además del servicio inmejorable, habitaciones con todo el confort que requiere el cliente de hoy y con dos detalles más que relevantes: un Spa digno de todos los elogios con una piscina de grandes dimensiones, sala de aparatos de excelente equipamiento, sauna húmedo y seco y un servicio wifi gratuito, potente y sin password, con una yapa además contundente: un desayuno buffet excelente.

Lo negativo

El microcentro sigue en obras, la ciudad no luce muy limpia, hay olores indeseables y mucha gente en situación de calle. El incomprensible sistema al que obliga la política económica del gobierno hace que la calle Florida se haya convertido en un folclórico pero muy desagradable lugar de acoso por parte de "los arbolitos", agentes de cambio de moneda clandestinos que atosigan al paso voceando "cambio,cambio". Cuando el cambio oficial está a 8 y algo, en las cuevas de esta peatonal se paga a doce y algún punto más. A pesar de los riesgos que implica el cambio negro en cualquier parte del mundo, no hay como evitar merodear por allí.

Comer en Capital Federal

Dejó de estar "regalado" como la última vez (diciembre 2014), se sigue comiendo "como los dioses" pero más caro. Para dos personas con vino y postre los precios oscilan entre 500 y 600 pesos argentinos (de 40 a 50 dólares los dos).

Esta vez sí pudimos llegar hasta San Telmo para ver que tal La Brigada, una parrilla tradicional de la ciudad que cuando nos la recomendaron nos dijeron. "los mozos no cortan la carne con cuchillo, lo hacen con cuchara..

Claro, ahí los precios son otra cosa pero...vale la pena y otra característica, hay en vitrinas, camisetas de fútbol de todos lados. La encontramos, como corresponde allá arriba en el techo, no vimos otra...


Ir al teatro

Las entradas al teatro que nunca son baratas, en este momento "duelen" bastante. La platea en el Maipo para ver Escenas de la vida conyugal con Ricardo Darín y Erica Rivas cuesta 500 pesos argentinos (41 dólares). La obra a nuestro entender pinta una mirada bastante realista del matrimonio pero el mensaje...Darín un "capo" y Erica Rivas notable.

Para ver Venus en piel en la Sala Neruda del Paseo de la Plaza con Carla Peterson y Juan Minujin hay que oblar por platea 330 pesos argentinos (USD 27,5). El papel de Peterson es sencillamente extraordinario, "se roba" el espectáculo, muy bien acompañada por Minujin. La obra transcurre en un teatro ubicado en un espacio único de la Capital Federal como es Paseo La Plaza a la altura de Corrientes y Montevideo. Quienes no conocen este lugar deberían ir, les va a encantar ya que además hay una excelente propuesta gastronómica. La recomendación: Restaurante Las Cañas.



Más respeto que soy tu madre, el éxito de público en El Nacional con Antonio Gasalla y renombrado elenco, tiene las plateas a 450 argentinos (USD) 37.50), el mismo precio que por ejemplo cuesta el monumental espectáculo Stravaganza en el Broadway. A pesar del gran suceso que tiene esta obra y de la idolatría que genera Gasalla (apenas aparece en escena "se cae" el teatro ovacionándolo, nos costó bastante reírnos. Parece ser que las palabrotas y la violencia son el mensaje del momento.

Nos habíamos resistido hasta ahora a ver elste espectáculo. Nos habían "presionado" fuertemente en casa para hacerlo. Al final aceptamos y concurrimos este domingo. Es sencillamente sensacional, un espectáculo excelente con una puesta a lo grande. Maxi de la Cruz en un casi-protagónico que le permite lucirse mucho y demuestra una vez más la generosidad de los argentinos para "abrirle la puerta" al talento sin cuestionar la nacionalidad.

Obviamente que "nos llevaron" de shopping lo cual no es nuestro fuerte pero los precios no están nada tentadores.

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